Descripción
La década que se abre con la crisis de principios de siglo fue testigo de transformaciones profundas en el modo de pensar la responsabilidad estatal sobre lo público. Salud fue un espacio de cambios en el que la recuperación de la noción de derecho fundamental cobró cuerpo en iniciativas que buscaron igualar las condiciones de su ejercicio.
Este libro analiza el recorrido de la política sanitaria nacional y provincial en las relaciones intergubernamentales en el Gran Buenos Aires, región que concentra más de un tercio de la población del país y en la que los municipios son los principales actores en la provisión de servicios de salud.
El diálogo entre políticas y matriz institucional muestra que las relaciones entre niveles de gobierno no son solo “restricciones”, sino que abren también márgenes de posibilidad considerables para gobernar reformas poniendo en evidencia pliegues y matices que se construyen en torno a la idea de igualdad como desafío de las políticas.