Descripción
El título que Alejandro Blanco y Luiz Carlos Jackson eligieron para el original trabajo de investigación y análisis que encierra este libro, Sociología en el espejo, no podía ser más adecuado. Pero el espejo tiene más de una superficie. En el centro del estudio se halla el proceso de institucionalización académica de la sociología en dos países, la Argentina y Brasil, más concretamente en dos sistemas académicos, el de la Universidad de Buenos Aires y el de la Universidad de San Pablo. Se trata de la sociología como ciencia empírico-analítica, es decir, tal como se la entenderá en los países occidentales a partir de la segunda posguerra. En Brasil, la tarea de encauzar y hacer productiva la disciplina tiene un nombre emblemático, el de Florestan Fernandes; en la Argentina, el de Gino Germani, y cada caso servirá de espejo al otro. Ni en la Argentina ni en Brasil el pensamiento social nació con el advenimiento de la sociología empírica, y esta debió legitimar su empresa mediante el ajuste de cuentas con tradiciones intelectuales que habían tenido en el ensayo su género de expresión más representativo. El ejercicio comparativo elaborado por Blanco y Jackson lleva así a los años treinta del siglo XX y a las expresiones del ensayismo en los dos países. Al preguntarse por los efectos del discurso sociológico sobre otros campos del saber académico, los autores ponen bajo foco el estudio de la literatura y la labor de dos grandes críticos, el brasileño Antonio Candido y el argentino Adolfo Prieto. Para comparar las dos experiencias, Jackson y Blanco han montado, pues, un espejo de varias dimensiones, en el que la historia institucional se conecta con la historia intelectual, y con una dinámica que excede el ámbito de la cultura para incluir las vicisitudes de la vida política en un período de treinta años. Un gran trabajo.