Descripción
“Hasta hace pocos años los pueblos originarios eran gente sin historia, sin sonidos, sin música. La matriz de la colonialidad no sólo despojó de sus voces a dichos pueblos, sino también de sus sonidos, de su universo sonoro. En este sentido, el presente libro constituye un aporte valioso y una repuesta con ímpetu crítico a la colonialidad internalizada en nuestro ser. Nos invita a repensar nuestro presente y nuestro pasado.
Nos interpela a concebir nuestro universo sonoro y las construcciones identitarias en torno a él. Nos sitúa en el presente de los pueblos originarios y su participación en el universo sonoro “autóctono” actual. Nos obliga a leer más allá y escuchar más allá…”.