Descripción
En el largo trayecto de estructuración del Estado, las reflexiones sobre las disciplinas humanísticas intervinieron en la construcción de las subjetividades nacionales. La obra de Diego Bentivegna explora, con notable erudición y dominio de la historia cultural, distintos momentos en los que funcionarios intelectuales o filólogos convocados por el aparato estatal se propusieron orientar la formación ciudadana.
El libro transita desde las reflexiones de Esteban Echeverría sobre la enseñanza moral en la escuela primaria hasta los planteos de Amado Alonso y Américo Castro, que privilegian el disciplinamiento del lenguaje para homogeneizar el cuerpo social. Un lugar significativo ocupan Calixto Oyuela, Joaquín V. González y Ricardo Rojas, quienes interrogan la tradición literaria, valoran la cultura popular y construyen el canon de lecturas escolares distanciándose del cosmopolitismo de las generaciones previas al Centenario. El estudio sobre Juan Cassani y Juan Mantovani, representantes del esperitualismo pedagógico de 1920 y 1930, expone cómo conjugan la preocupación por la comunidad nacional con el carácter formativo de la educación literaria. Así, las variadas propuestas de regulación pedagógica que el ensayo recorrre con lucidez nos revelan las representaciones que los autores tienen de los sujetos escolarizados, la cultura escrita y las lecturas legítimas, así como de su articulación con los modelos de nación dominantes.
Por Elvira Arnoux