Descripción
Este libro señala los lineamientos que influyeron en la pastoral de la Iglesia, para luego focalizar la atención en el análisis de la conflictividad social configurada en las regiones de Quebrada y Puna jujeñas, entre el llamado “Aguilarazo” de 1973 y el final de la era menemista, período marcado por la profundización de las tensiones en el campo popular y la extensión de los escenarios de protesta. Entre 1973 y 1999 sucedió, en efecto, un sinnúmero de conflictos que afectaron a los pobladores jujeños y que, sobre todo a partir del golpe de facto, tuvieron que ver con las políticas sociales y económicas implementadas en todo el ámbito social.