Descripción
Lo que está planteando la llamada economía feminista no es un intento de ampliar los métodos y teorías existentes para incluir a las mujeres. Se trata de algo muchísimo más profundo. Se pretende un cambio radical en el análisis económico que pueda transformar la propia disciplina y permita construir una economía que integre y analice la realidad de mujeres y hombres, teniendo como principio básico lo que designaremos como sostenibilidad de la vida.