Descripción
Las lecturas tradicionales de la obra de John Locke lo han ubicado como un ideólogo de la apropiación capitalista ilimitada o buscaron en su pensamiento político la piedra angular sobre la cual fundar derechos de propiedad absolutos, incompatibles con la redistribución. Juliana Udi explora en este libro los claroscuros de esas interpretaciones y plantea la necesidad de recuperar los presupuestos teológicos que éstas ignoraron. Este “giro religioso”, que pone al descubierto la importancia de los deberes de caridad, reflexiona Udi, abriría las puertas a un “giro igualitario” en la recepción de la teoría de la propiedad de Locke. Al establecer la existencia de un vínculo necesario entre los derechos de propiedad y la preservación de la vida, el análisis de la caridad revela el potencial que encierra la argumentación de Locke para sostener no solo que la propiedad privada y la redistribución son compatibles, sino la idea más radical de que se requieren mutuamente.