Descripción
Este libro analiza cómo el gremialismo socialista afrontó el desafío de la estatalidad en el movimiento obrero, impulsada por Perón desde la nueva Secretaría de Trabajo y Previsión. Los dirigentes de cuño socialista reaccionaron diversamente ante el intervencionismo social, en parte porque sus posiciones se inscribían en debates que antecedían al golpe militar de 1943. Así, la adhesión que logró el nuevo proyecto político no fue tan sólo favorecida por la posición prescindente que el Partido Socialista había alentado, sino más bien por la fuerte politización que expresaban sus principales cuadros sindicales.
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